Estimados amigos de Puente: Cada día está claro que juntos somos más fuertes. Puente continúa siendo un lugar seguro para todos nosotros en la Costa Sur y especialmente para nuestros vecinos inmigrantes que, a pesar de su duro trabajo, bondad e infinitas contribuciones a la economía global y local, han sido atacados. Me emocionan las historias de mis vecinos que permanecen firmes y valientes frente a las amenazas de políticas de inmigración injustas. Me inspiran mis vecinos que están estudiando para sus exámenes de ciudadanía y los voluntarios locales y regionales que les están ayudando a preparase. Me motivan los niños y niñas pequeños y sus padres en nuestra cooperativa bilingüe de cuidado infantil que aprenden juntos cada día construyendo un puente de amistad e inclusión. Me conmueven los jóvenes del Programa de Empleo y Liderazgo que se esfuerzan para alcanzar sus más altos sueños, así como los muchos voluntarios que los apoyan a lo largo del camino. Me animan esos vecinos que buscan servicios de salud física y mental para mejorar su calidad de vida. En cada uno de mis vecinos de la Costa Sur hay una historia de resistencia y esperanza. Igualmente hay una historia de vecinos o extraños que ofrecen una mano abierta y también un corazón abierto para ayudar a que nuestra comunidad sea sana, sostenible e inclusiva. Algunos días este apoyo mutuo parece un milagro. En otros días sé que es el resultado de incontables personas que proporcionan el tiempo, el apoyo y los recursos necesarios para que organizaciones pequeñas y aisladas como Puente sobrevivan. Me honra compartir esas historias con ustedes en este informe anual. Las necesidades que requieren el trabajo de Puente nunca han sido más grandes, especialmente cuando las políticas nacionales afectan la supervivencia y el progreso de nuestra comunidad agrícola. De antemano les estamos muy agradecidos. No podríamos hacer nuestro trabajo sin su apoyo. Afectuosamente, Directora Ejecutiva Carta de Rita Mancera 3